Un mensaje cargado de dolor, indignación y preocupación fue el que emitió este martes Carlos Felipe Córdoba, excontralor general de la República, ante el deterioro del orden público en Colombia y el aumento de ataques contra la fuerza pública. En sus palabras, expresó un sentimiento que cada vez más colombianos comparten: tristeza por un país que parece estar perdiendo el control frente al crimen.

“Hoy nuestra patria está de luto”, afirmó Córdoba, haciendo alusión a los recientes asesinatos de soldados y policías en actos violentos perpetrados por grupos armados ilegales. Con voz firme y tono emocional, el exfuncionario señaló que esta situación es consecuencia directa de una actitud complaciente del Estado frente a los delincuentes.

El excontralor no dudó en calificar como héroes a los uniformados fallecidos, hombres y mujeres que han dado su vida por proteger a la nación. Pero también fue tajante en denunciar el abandono en el que, según él, se encuentra la fuerza pública: “Están desmoralizados, disminuidos y sin respaldo. Les han quitado el principio de autoridad”.

En un llamado directo al Gobierno, Córdoba exigió medidas urgentes: dotar a los militares de mejores capacidades, reformar la Constitución si es necesario, y asumir una postura firme frente a los violentos. “Hay que cambiar la Constitución y dotar militarmente a nuestros soldados. Se necesita mano fuerte para devolverle la confianza a nuestros soldados y policías”, dijo.

A su vez, extendió un mensaje de apoyo a las familias de los caídos, asegurándoles que no están solas y que el país necesita recuperar el respeto por sus uniformados. “Cuando uno pasa por ciertas zonas del país, se siente dolor de patria. Eso no se puede normalizar”, advirtió.

Córdoba concluyó su mensaje con una reflexión profunda: Colombia necesita recuperar su rumbo, darle poder a la institucionalidad y permitir que la ciudadanía vuelva a confiar en quienes están llamados a protegerla.